Mapa
de la Europa de los congresos
1. Usa cera o lápiz para pintar, y no aprietes demasiado.
2. Cada error supone un punto menos.
3. Pon los colores correspondientes en la leyenda.
4. No olvidéis colorear las islas que corresponden a cada
estado.
5. Colorea en amarillo el reino de España, que incluye
las islas Baleares.
6. Colorea en azul claro el reino de Francia.
7. Colorea en azul oscuro las dos mitades del reino de
Prusia.
8. Colorea en verde oscuro el Imperio ruso, incluidas
Besarabia, Finlandia y Polonia.
9. Colorea en gris el Imperio de los Austrias, que
incluye Austria, Hungría y territorios italianos.
10. Colorea en naranja el reino de Holanda.
11. Colorea en rojo el Reino Unido de Gran Bretaña, que
incluye las islas de Gran Bretaña e Irlanda, así como múltiples islas y
enclaves europeos.
12. Colorea en rojo el reino de Hannover en Alemania. El
rey de Hannover era al mismo tiempo el soberano de Gran Bretaña, pero los dos
reinos tenían leyes, instituciones, monedas y ejércitos diferentes.
13. Colorea en amarillo el reino de Suecia, que incluía
Noruega.
14. Colorea en castaño el reino de Cerdeña, que incluía
Saboya y Piamonte.
15. Colorea en violeta, morado o lila el reino de las Dos
Sicilias, que incluía Nápoles y la isla de Sicilia.
16. Colorea en rosa los Estados Pontificios.
17. Colorea en castaño el reino de Portugal.
Explicación del mapa histórico:
El mapa de La Europa de los congresos muestra
las fronteras de Europa tras la derrota de Napoleón.
Las potencias[1]
vencedoras tenían claro que su principal objetivo no era aumentar su poder
individual de forma egoísta, sino volver al sistema del Antiguo Régimen,
restableciendo las monarquías y cambiando las fronteras establecidas por la
Revolución (francesa) y por Napoleón.
Comenzando por el este vemos como el Imperio ruso se
ve engrandecido tras la derrota de Bonaparte. El gobierno ruso recuperó la
región de Besarabia que había cedido tres años antes al Imperio de los turcos
otomanos. Tras la eliminación del Gran Ducado de Varsovia recuperó los
territorios polacos que había cedido a Napoleón. Al norte recibió Finlandia de
Suecia que, a cambio, fue compensada con Noruega, que, a su vez, le fue
arrebatada a Dinamarca, aliado derrotado de Bonaparte.
El reino de Prusia recuperaba también sus territorios
polacos al disolverse el Gran Ducado de Varsovia y avanzaba sus fronteras hasta
la cuenca del río Rhin (región de Renania) tras la eliminación de la
Confederación del Rhin.
Como Prusia y Francia pasaban a tener una frontera
común se estableció un estado-tapón[2],
el reino de Holanda, el cual estaba formado por los antiguos Países Bajos
austríacos y las antiguas Provincias Unidas de los Países Bajos.
[1] Una potencia es un
estado con un gran poder político y militar, una población numerosa y un
territorio extenso. Una potencia es capaz de vencer en una guerra a la mayoría
de los otros países, excepto a otra potencia. Eso es la causa de que las
potencias puedan influir sobre los otros países para conseguir sus objetivos
políticos, económicos…
[2] Un estado-tapón es
un estado que existía para separar a dos potencias vecinas intentando limitar
las fricciones o choques entre esas potencias al reducir sus fronteras comunes.
Por ejemplo: Rusia y Gran Bretaña permitieron que existiese Afganistán desde el
siglo XIX para separar sus imperios, desde el siglo XIX existe Mongolia para
separar Rusia de China, desde el siglo XX existe Nepal para separar India de
China.
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