martes, 27 de marzo de 2012

El regeneracionismo y la cultura española PARA 4º E.S.O.

http://www.youtube.com/watch?v=KTxoOwrhDTQ

Imphal (1944)










El pistolerismo en Barcelona PARA 4º E.S.O.

    En los años previos a la dictadura de Primo de Rivera se vivió una situación de extrema violencia en Barcelona, donde se enfrentaban los pistoleros de los empresarios con los del sindicato anarquista C.N.T. (Confederación General de Trabajadores).
    Una buena novela sobre este tema es "La verdad sobre el caso Savolta" de Eduardo Mendoza.

La dictadura de Miguel Primo de Rivera 4E.S.O.

Enlace a un documental de quince minutos.http://www.youtube.com/watch?v=iq0OZ2HvGHE&feature=related

El desastre de Annual n.º 30















Enlace a una canción popular de principios del siglo XX sobre la guerra de África.

http://www.youtube.com/watch?v=tKKmUx1RDQU

Enlace a documental sobre la Semana Trágica.

http://www.youtube.com/watch?v=KSKAkU7vO38&feature=related

Enlace a un documental de dos minutos sobre el desastre de Annual.

http://www.youtube.com/watch?v=zdgAitG5y-Q&feature=related

Mapa de la expansión del islam AMPLIADO EL TEXTO

MAPA DE LA EXPANSIÓN DEL ISLAM CON LOS CALIFAS ORTODOXOS O PERFECTOS Y LOS CALIFAS OMEYAS

Tras la muerte de Mahoma la comunidad islámica eligió como nuevo jefe a un “sucesor del enviado de Allah” (jalifa rasul Allah). El califa dirigía la comunidad en sus aspectos religioso y político.

La primera dinastía musulmana fue la de los llamados califas ortodoxos o perfectos (632-661). Estos fueron elegidos por la comunidad musulmana entre hombres que estaban relacionados con Mahoma y habían colaborado con él.

El primer califa ortodoxo fue Abu Bakr[1] [632-634], suegro de Mahoma, que consiguió mantener unida la comunidad musulmana tras la muerte del Profeta.

El segundo califa fue Umar[2] [634-644]. Sus tropas conquistaron Siria, Palestina, Egipto y Mesopotamia (actual Iraq) derrotando a bizantinos y sasaníes. Umar fue el primer califa en ser llamado “príncipe de los creyentes” (amir al-mu`minim). Murió asesinado por un esclavo.

Utmán[3] [644-656], el tercer califa, estuvo casado sucesivamente con dos hijas del Profeta, se ocupó de establecer la versión definitiva del Corán. Fue asesinado por un enemigo político.

Alí[4] [656-661], el último califa ortodoxo, era primo de Mahoma y estaba casado con su hija Fátima[5]. También murió a manos de sus enemigos políticos.

La familia de los Omeyas fue la segunda dinastía musulmana (661-750). Estos califas pertenecían al clan quraysí que dominaba La Meca y al que pertenecía también la familia de Mahoma. El primer califa omeya, Mu’awiyya[6] I, fue un general que se había rebelado contra el califa Alí. Tras la muerte de Alí fundó la dinastía omeya (Banu Umayya), trasladando la capital desde La Meca y Medina, ciudades santas del Islam, a Damasco, ciudad más cercana al mar Mediterráneo y a las nuevas conquistas.

El inicio de la nueva dinastía supuso la ruptura de la comunidad islámica en dos bloques enfrentados: Sunnismo y Chiismo. Los sunníes aceptaban que cualquier musulmán podía ser califa y que junto al Corán existía la Sunna, un conjunto de tradiciones (hadiz) sobre las decisiones, actitudes y dichos de Mahoma. Los chiitas sólo aceptaban el Corán y creían que el califato debía reservarse a los descendientes de Mahoma, a través de la familia de Alí. Esta corriente sólo es mayoritaria en Irán.

Durante la dinastía de los Omeyas la expansión del califato musulmán alcanzó su máxima extensión, desde la península ibérica hasta las fronteras de China. Al contrario que los califas ortodoxos o perfectos, elegidos por los miembros de la comunidad musulmana, los gobernantes omeyas debían su poder a pertenecer a su familia.

Durante el califato omeya surgieron conflictos que debilitarían la dinastía como las revueltas chiitas, la exigencia de los pueblos conquistados una vez que se convirtieron al Islam de ser iguales en derechos a los árabes conquistadores, y el rechazo de todos los súbditos del imperio a nuevos impuestos establecidos por los califas debido al descenso de los ingresos que se produjo al detenerse las conquistas.

En este mapa vemos el imperio musulmán cuando alcanzó su extensión máxima bajo los últimos califas omeyas[7].

El principal enemigo del califato era el imperio bizantino, que en el año 711 derrotó a la dinastía[8] de los Omeyas cuando intentaron conquistar Constantinopla.

Los límites del califato se establecieron…

·      Por Occidente en los Pirineos. Tras conquistar la península ibérica los ejércitos musulmanes intentaron penetrar en el reino de los francos, pero fueron vencidos en la batalla de Poitiers (732) por Carlos Martel, un noble franco.

·      Hacia el este la frontera de imperio islámico se fijó en los ríos Indo y Sir Daria, pues en esa dirección se hallaba el poderos imperio chino de la dinastía Tang[9], que derrotó a los ejércitos musulmanes en la batalla del río Talas.

·      Hacia el norte de Asia el avance de las tropas omeyas se detuvo, no tanto por los accidentes geográficos (cordillera del Cáucaso, mar Caspio, mar de Aral) como por la inexistencia de sociedades urbanas organizadas en las estepas [grandes llanuras de hierba]. La cultura musulmana es una cultura urbana, donde las ciudades juegan un papel fundamental como centros económicos (mercados) y religiosos (mezquitas).

·      Las estepas estaban gobernadas por diversas tribus nómadas de origen turco[10] como los oguces[11] y los jázaros[12]. La sociedad musulmana era difícil de traspasar a los nómadas pues estaba basada en la vida urbana, lo que también explica la importancia del comercio en la economía del califato.

·      En dirección sur, hacia el interior de África, el avance del Islam se prolongaría durante toda la Edad Media, aunque se viera retardado por la enorme extensión del desierto del Sahara. El califato omeya mantuvo relaciones comerciales con los estados situados al sur del desierto del Sahara como el imperio de Kanem.

 

El califato musulmán se extendió por inmensos territorios y puso en contacto Europa del norte, los territorios africanos al sur del Sahara, China e India. Mercancías e ideas (uso del papel, números arábigos – en realidad, los inventaron en la India-, seda, especias…) circulaban por todo el imperio a lomos de camellos, mulas carromatos y a bordo de todo tipo de barcos, siguiendo las rutas comerciales que aparecen en el mapa señaladas con líneas discontinuas.

La riqueza e importancia del imperio islámico se puede apreciar en que estaba formado por numerosas ciudades con decenas o cientos de miles de habitantes cada una, mientras en Europa en esa época sólo alcanzaba esa cifra Constantinopla, la capital del imperio bizantino. El resto de las ciudades europeas no alcanzaban los diez mil habitantes.

En Europa el estado más importante era el imperio bizantino, heredero de la mitad oriental del antiguo imperio romano. Los emperadores de Bizancio lograron detener la expansión musulmana contra sus fronteras, y también evitaron ser conquistados por sus vecinos del norte como los búlgaros. La cultura bizantina, basada como la de Roma en las ciudades y el comercio, influyó poderosamente en la musulmana.

Al norte del imperio bizantino se encontraban los estados de los búlgaros y los ávaros. Ambos pueblos habían llegado desde el interior de Asia a Europa viajando por las estepas que se extendían desde el norte de China hasta la actual Hungría. Al llegar al extremo occidental de las estepas se habían instalado en Europa oriental dominando a la población originaria que encontraron. Tanto los ávaros como los búlgaros llevaban un estilo de vida nómada semejante al de los jázaros y los oguces, y todos ellos basaban una parte de su riqueza en saquear[13] a sus pueblos vecinos y convertirlos en esclavos.

En esta época los eslavos[14], un pueblo dividido en una gran cantidad de tribus desorganizadas que se encontraban dispersas por Europa central y oriental, fueron víctimas de los ataques de sus vecinos ávaros, búlgaros, francos y bizantinos.

Los estados que existían en Europa occidental también eran débiles políticamente y atrasados económicamente. Es esta época ningún gobierno de Europa occidental fue capaz de construir un edifico de piedra de un tamaño semejante o igual al de la iglesia de Santa María la Blanca en Fuentes de Andalucía, mientras en el mundo musulmán se levantaban enormes edificios públicos como la mezquita de Córdoba.

El reino cristiano que ocupaba el norte de la península ibérica era muy débil, pues sus reyes apenas se podían hacer obedecer por su población, y era tan pobre que casi toda la población vivía en el campo y las ciudades habitadas (definidas siempre por sus murallas) eran todas más pequeñas que Fuentes de Andalucía.

Los lombardos que controlaban parte de la península itálica se encontraban divididos entre sí y enfrentados al imperio bizantino que gobernaba parte de Italia.

El estado más fuerte de Europa occidental era el reino de los francos, fundado varios siglos antes cuando el pueblo germánico de los francos se apoderó de parte de las tierras del antiguo imperio romano. A pesar de estar desgarrado por guerras civiles y de tener una economía atrasada basada en la agricultura de subsistencia este reino era más fuerte que sus vecinos y pudo rechazar la invasión musulmana. Aún así la debilidad de los reyes francos se ve en que durante siglos no pudieron apropiarse de la pequeña región occidental de Bretaña.

La tercera dinastía musulmana fue la de los Abasíes (750-1258). Tomó el poder mediante una revolución en la que fueron asesinados todos los miembros de la familia omeya salvo uno. Con la nueva dinastía los árabes dejaron de formar una clase dirigente frente a los demás pueblos convertidos al Islam (persas, beréberes, turcos…). Los Abasíes trasladaron la capital a Bagdad, que con ellos se convirtió en una de las ciudades más grandes del mundo medieval. Durante su primer siglo de gobierno se vivió una etapa de intenso comercio y creciente riqueza siendo su califa más famoso Harun al-Rasid[15], que gobernó del 786 al 809, pero progresivamente el califato fue perdiendo poder al independizarse diversas regiones musulmanas (al-Ándalus, norte de África…) y al depender cada vez más los califas de sus soldados mercenarios de origen turco. En el siglo X el califato abasí se desintegró de tal forma que los califas sólo gobernaban Bagdad y alrededores, aunque continuarían siendo un símbolo de la unidad del Islam, hasta la destrucción de Bagdad por los mongoles en el año 1258.

 

SEGUIR CON LOS ABASÍES

EXPLICAR LA POLÍTICA MUSULMANA VINCULADA A FAMILIA, ESTRUCTURA DE LA FAMILIA

ORIGEN DEL PODER EN LA RELIGION

FALTA DE INSTITUCIONES INTERMEDIAS COMO GREMIOS O CIUDADES O PARLAMENTOS

PODER DESPÓTICO ABSOLUTO BASADO EN LA FUERZA

IMPORTANCIA DE MAMELUCOS.



[1] El nombre Abu Bakr es en realidad un apelativo que suele traducirse como “el papá de los camellitos”, porque el primer califa tenía un número importante de estos animales, de los que se ocupaba mucho. Su nombre completo era Abu Bakr Abd Allah ibn Utmán ibn Ka’b al-Quraysh [el papá de los camellitos siervo de Dios hijo de la cría de avutarda nieto de Ka’b el (de la tribu) Quraysí].

[2] Umar ibn al-Jattab [el próspero hijo de al-Jattb].

[3] Utmán ibn Affan [la cría de la avutarda hijo de Affan].

[4] Abu al-Hasan Ali ibn Abu Talib [el padre del guapo, el noble, el hijo del padre del estudioso].

[5] Fátima [la casta] al-Zahra [la luminosa] fue la hija más joven de Mahoma con Jadiya [la hija prematura], su primera mujer, y fue esposa de Alí, sobrino de Mahoma.

[6] Mu’awiyya ibn Abu Sufyan [Mu’awiyya hijo del padre de Sufyan].

[7] Los Omeyas eran una familia emparentada con Mahoma. Tras una guerra civil se convirtieron en la dinastía gobernante del califato musulmán. Su gobierno se extendió del año 661 al 750. Con ellos el imperio islámico alcanzó su máxima extensión.

[8] Dinastía: es un conjunto de reyes o gobernantes de un lugar que pertenecen a la misma familia.

[9] La dinastía Tang gobernó China entre los años 618 y 907. Fue una etapa de paz dentro del país, y de expansión por Asia Central para dominar la ruta de la seda por donde se transportaba este producto desde China hasta Europa. En ese momento China era el estado más poblado del mundo.

[10] Los turcos son un conjunto de pueblos diferentes que hablan lenguas emparentadas (como lo están el castellano con el francés, el portugués, el catalán o el italiano). Al principio de la Edad Media casi todos los pueblos turcos compartían un estilo de vida nómada y vivían al este del mar Caspio. Durante la Plena Edad Media (1000-1300) los pueblos turcos empezaron a emigrar hacia el oeste llegando al territorio de la actual Turquía.

[11] Oguces: pueblo de origen turco establecido desde mediados del siglo VIII en las inmediaciones del mar de Aral. A partir del siglo XI emigrarían hacia el oeste y formarían varios imperios, incluido el de los turcos otomanos que fue el origen del país hoy llamado Turquía.

[12] Jázaros: pueblo de origen turco que, desde el siglo VII al X, dominó la región entre el mar Caspio y la península de Crimea, y las estepas entre los ríos Don y Dniéper. Su poder fue destruido en el año 969.

[13] Saquear: robar de forma violenta un grupo de soldados todo lo que se encuentra en un lugar ocupado militarmente por ellos.

[14] Los eslavos son un conjunto de pueblos diferentes que hablan lenguas que tienen un mismo origen. Durante la Edad Media fueron diferenciándose y convirtiéndose en los que hoy son los polacos, los rusos, los servios, los eslovacos, los checos, los eslovenos, los croatas… Durante la Alta Edad Media (476-1000) los pueblos eslavos todavía no formaban reinos de modo que sus tribus solían ser débiles, además eran paganos (adoraban a varios dioses) lo que los separaba de los cristianos y de los musulmanes. Los dos factores anteriores explican que la mayoría de los esclavos blancos en el mundo musulmán y en el mundo cristiano occidental fueron los eslavos. Tan importante fue ese comercio de esclavos que en castellano y en inglés las palabras esclavo/slave y eslavo /slav son casi idénticas. En castellano la palabra esclavo sustituyó a los sustantivos derivados de servus (esclavo en latín), y palabras como sirviente, servidor o siervo dejaron de referirse a un tipo de trabajo forzado.

[15] Harún al-Rasid [Aarón el Justo] gobernó al mismo tiempo que Carlomagno, emperador carolingio, y su fama lo convirtió en el protagonista del libro Las Mil y Una Noches.

martes, 20 de marzo de 2012

Clases de racismo en una escuela nazi

Fragmento de la película "Europa, Europa"

http://www.youtube.com/watch?v=CqS-E5eWG_g

Enlace para ver en Youtube la película "Europa, Europa", en alemán (y otras lenguas de Europa) subtitulada en inglés.

http://www.youtube.com/watch?v=DdWfIAVoGTw&feature=related

miércoles, 14 de marzo de 2012

domingo, 11 de marzo de 2012

105. MIEMBRO DE UNA TRIBU BEREBER

Los bereberes eran miembros de tribus norteafricanas. Generalmente eran tratados como si fueran de segunda clase por los árabes pero soportaron lo peor de las obligaciones militares en las primeras campañas norteafricanas y España.
Al principio eran infantería en su mayoría, con unos pocos de caballería ligera que se parecían mucho a los primeros moros (todavía empleados por los bizantinos a través del siglo VI y a inicios del siglo VII). Más tarde llegaron a ser principalmente caballería y a estar mucho más arabizados en ropa y armas, aunque muchos continuaron recordando a los moros o vestidos como aquí, con la simple incorporación en ambos casos de un turbante.
En el momento de la conquista de España en el año 711, los bereberes luchaban o desnudos o con un taparrabos, armados primordialmente con jabalinas, lanzas, arcos y hondas.


96. SOLDADO DE INFANTERÍA ÁRABE

Al principio de su periodo de expansión los árabes confiaban claramente más en su infantería que en su caballería, aun considerando que un soldado de caballería valía tanto como para cobrar doble paga.
Este hombre es un beduino (es decir un nómada, a diferencia de los árabes sedentarios), descrito como “la materia prima del Islam”, y usa el traje beduino tradicional. El largo sobretodo y la túnica por debajo habrían sido tejidos de lana de camello. En sus brazos hay tiraces, brazaletes tejidos en seda de colores que llevaban inscripciones bordadas, con frecuencia del Corán. Los colores de la vestimenta eran brillantes, como escarlata, rojo, azul, amarillo, verde y blanco, y a veces estaban a rayas. Los caudillos usaban las ropas más brillantes, decoradas con bordados de oro y de colores. Los turbantes lo más común es que fueran blancos pero en ocasiones eran de colores. Todos los árabes usaban barbas.
Una fuente de principios del siglo IX menciona uniformes, y tan pronto como en el año 737 a un ejército completo en campaña contra los Jázaros se le habían suministrado uniformes blancos, siendo el blanco el color de los Omeyas la dinastía gobernante. De la misma manera algunas tropas abasíes parecen haber usado el negro.
Las principales armas eran saif y lanza, siendo la primera una espada recta de hierro o acero que tradicionalmente se suspendía de un tahalí. El uso de la espada colgada del cinturón fue introducido de forma oficial a mediados del siglo IX. La jabalina o harbah también era usada y había sido un arma favorita de los mercenarios quraish preislámicos. Los escudos se llamaban o turs (grandes y redondos, de madera y cuero) o daraqa (más pequeños y enteramente de cuero).
Algunos soldados de infantería usaban armadura, formando estos las filas frontales cuando se disponía de ellos.


97. ARQUERO ÁRABE

Los árabes mucho antes de la llegada del Islam usaban arcos compuestos y arcos simples de hasta metro y medio de largo y el arco había llegado a ser una de sus armas nacionales. De manera poco usual, lo llevaban en el hombro derecho. La leyenda registra que Mahoma a menudo solía apoyarse en un arco mientras predicaba, y el Corán dice “la mano del hombre no ha empuñado un arma a la que el arco no pueda aventajar”. Las aljabas contenían normalmente treinta flechas.
Los ejércitos fatimíes reclutaban sus arqueros entre los sudaneses (véase la nota 104). Las fuentes más tempranas los llaman nubios y la puntería de sus arqueros es registrada tan pronto como en el año 643, cuando dejaron ciegos a tantos árabes por sus lluvias de flechas que fueron apodados “los arqueros de los ojos”.

106. MIEMBRO DE UNA TRIBU DAILAMI

Los dailamis eran unos violentos montañeses de la región al sur del mar Caspio. Durante esta época sirvieron como mercenarios con los Sasaníes, los Samaníes, los Buyíes (ellos mismos una dinastía dailami), los Fatimíes, los Safaríes y los Gaznavíes, y posteriormente con los Selyúcidas hasta el final del siglo XII.

Luchaban principalmente como infantería aunque usaban mulas o camellos para el transporte y los más ricos viajaban a caballo.

Su caballería la suministraban sobre todo mercenarios turcos y ghulams.

Sus armas habituales consistían en espada, escudo pintado con colores brillantes y zupin, esta última una jabalina corta usada para apuñalar o lanzar.

Las descripciones contemporáneas de la zupin son traducidas por lo general como “dos hojas” o “dos puntas”, pero lo absurdo de un arma semejante lo hace parecer improbable; es más probable que se entienda como “dos filos”. Por añadidura los dailamis usaban a menudo hachas, y están registrados tanto arcos como una ballesta llamada nawak, mencionada en las fuentes de los siglos IX al XI.

sábado, 10 de marzo de 2012

98 y 99. SOLDADOS DE CABALLERÍA ÁRABES

Los estribos de hierro fueron introducidos probablemente desde Persia oriental a finales del siglo VIII, probablemente en el año 694. Con anterioridad a esta fecha (aunque por cuánto tiempo exactamente es algo inseguro – quizás treinta años o más) los árabes parecen haber usado estribos de madera.

La ilustración 98 está basada en un dibujo del siglo X. El soldado de caballería lleva una espada y una lanza llamada rumh, a menudo con un asta de bambú. En general se llevaba también una daga. Por lo menos algunos estaban armados con arcos, aunque arqueros árabes a caballo no se encuentran en las fuentes muy a menudo y parecen haber desaparecido del todo después del siglo IX.

Los escudos eran pequeños, circulares y ligeramente convexos, con un ribete alrededor del borde. Fuentes más tardías los describen como de madera, metal, cuero, o a veces de distintos tipos de madera cosidos juntos con algodón. Por regla general estaban pintados de colores brillantes.
La ilustración 99 es similar a la 96 excepto porque sobre su túnica el soldado de caballería usa una armadura de cuero o fieltro acolchado con mangas cortas y abullonadas, probablemente un bambakion como el descrito bajo la nota 3. Constantino Porfirogéneta (905-959) probablemente se está refiriendo a este tipo de armadura cuando dice que los Fatimíes usaban “justillos de color rosa” en lugar de cota de malla.
Las espuelas no parecen haber sido usadas en estas fechas.



viernes, 9 de marzo de 2012

Primero vinieron...

El siguiente texto es un sermón proclamado en Alemania durante la Semana Santa de 1946 por el pastor luterano alemán Martín Niemöller (1892-1984).
Niemöller sirvió en la I Guerra Mundial en un submarino, y tras el conflicto se convirtió en pastor (sacerdote) protestante. Al ser de ideas nacionalistas y anticomunistas apoyó a Hitler en sus primeros años. Sin embargo cuando los nazis empezaron a gobernar se les opuso porque intentaban controlar totalmente la vida de las personas. Fue detenido, juzgado y enviado los campos de concentración donde estuvo detenido, y se salvó de morir por poco, entre 1937 y 1945.

El orden exacto de los grupos y las palabras que forman el texto se discuten, ya que existen muchas versiones, la mayoría transmitidas oralmente.

«Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,
Cuando vinieron a buscar a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío.
Cuando finalmente vinieron a buscarme a mí,
no había nadie más que pudiera protestar.»

“Primero vinieron a por los comunistas
y yo no me atreví a hablar porque no era comunista.
Después vinieron a por los sindicalistas
y yo no hice oír mi protesta porque no era sindicalista.
Más tarde vinieron a por los judíos,
y yo no me opuse claramente porque no era judío.
Al final vinieron a por mí
Los campos

Rubén Darío (1867-1916)

Rubén Darío fue un poeta nicaragüense, máximo representante del modernismo literario en lengua española. Es posiblemente el poeta que ha tenido una mayor y más duradera influencia en la poesía del siglo XX en el ámbito hispánico. Es llamado príncipe de las letras castellanas.

Nacido en Nicaragua, empezó a leer y escribir muy joven; así a los trece años ya escribía sonetos y publicaba periódicos. En 1882, a los quince años, comenzó una serie de viajes por los distintos países de la América española, mientras trabajaba como periodista y literato, aprendiendo de todas sus experiencias.

En 1898, el año del desastre de Cuba, viajó a España donde residiría durante varios años. En ese tiempo entró en contacto con numerosos escritores españoles del momento, sobre los que tuvo una gran influencia.

Entre las obras de Rubén Darío se encuentran los Cantos de vida y esperanza (1904), que incluyen un poema titulado "A Roosevelt". En él expresa su confianza en la capacidad de resistencia de la cultura hispanoamericana frente al imperialismo anglosajón cuya cabeza visible era el entonces presidente de los Estados Unidos, Theodore Roosevelt. A continuación dos enlaces al poema:



En el mismo libro aparece un poema titulado “Los cisnes”, que alude a la idea ya vista de que la fuerza política y cultural de las potencias anglosajonas (Estados Unidos y Gran Bretaña) supone un peligro para el idioma español. Rubén Darío dedicó este poema a Juan Ramón Jiménez, poeta de Huelva al que concedieron el Premio Nobel de Literatura en el año 1956.
 A continuación reproduzco primero el poema “Los cisnes” y luego una carta personal enviada por Juan Ramón Jiménez, de 19 años entonces,  a Rubén Darío. Se nota como el joven autor cree necesario, y por ello busca, el apoyo del autor ya consagrado de 33 años.
 "Los cisnes"
         ¿Qué signo haces, oh Cisne, con tu encorvado cuello
         al paso de los tristes y errantes soñadores?
         ¿Por qué tan silencioso de ser blanco y ser bello,
         tiránico a las aguas e impasible a las flores?

         Yo te saludo ahora como en versos latinos
te saludara antaño Publio Ovidio Nasón.
Los mismos ruiseñores cantan los mismos trinos,
y en diferentes lenguas es la misma canción.
A vosotros mi lengua no debe ser extraña.
A Garcilaso visteis, acaso, alguna vez...
Soy un hijo de América, soy un nieto de España...
Quevedo pudo hablaros en verso en Aranjuez....
Cisnes, los abanicos de vuestras alas frescas
den a las frentes pálidas sus caricias más puras
y alejen vuestras blancas figuras pintorescas
de nuestras mentes tristes las ideas obscuras.

Brumas septentrionales nos llenan de tristezas,
se mueren nuestras rosas, se agostan nuestras palmas,
casi no hay ilusiones para nuestras cabezas,
y somos los mendigos de nuestras pobres almas.
Nos predican la guerra con águilas feroces,
gerifaltes de antaño revienen a los puños,
mas no brillan las glorias de las antiguas hoces,
ni hay Rodrigos ni Jaimes, ni han Alfonsos ni Nuños.
Faltos del alimento que dan las grandes cosas,
¿qué haremos los poetas sino buscar tus lagos?
A falta de laureles son muy dulces las rosas,
y a falta de victorias busquemos los halagos.
La América Española como la España entera
fija está en el Oriente de su fatal destino;
yo interrogo a la Esfinge que el porvenir espera
con la interrogación de tu cuello divino.

¿Seremos entregados a los bárbaros fieros?
¿Tantos millones de hombres hablaremos inglés?
¿Ya no hay nobles hidalgos ni bravos caballeros?
¿Callaremos ahora para llorar después?

He lanzado mi grito, Cisnes, entre vosotros,
que habéis sido los fieles en la desilusión,
mientras siento una fuga de americanos potros
y el estertor postrero de un caduco león...

...Y un Cisne negro dijo: "La noche anuncia el día".
Y uno blanco: "¡La aurora es inmortal, la aurora
es inmortal!" ¡Oh tierras de sol y de armonía,
aun guarda la Esperanza la caja de Pandora!
Carta de Juan Ramón Jiménez a Rubén Darío

Moguer, Junio 2 - 1900

Sr. D. Rubén Darío

Maestro y amigo muy querido:

Supongo en su poder una carta mía, en la que le daba cuenta de mi regreso de Madrid; aún estoy delicadísimo del pecho y la cabeza.

Por este mismo correo y en paquete certificado, remito a V. mi libro Ninfeas; las últimas poesías van aún en primeras pruebas; no he querido esperar más, pues se va prolongando mucho la salida de mis libros. Encontrará V. algunas poesías nuevas, desconocidas para V.

Ahora, me atrevería a rogarle que me hiciese el prólogo, lo más brevemente posible; si no tiene tiempo, hágalo corto o en verso o como crea más fácil y pronto, evitándose molestias; pero no deje de hacerlo, que colmará V. de ese modo mi ilusión de muchos días. En la imprenta está suspendida la tirada del libro, esperando el prólogo, para tirar las primeras páginas y el índice, arreglándose a la cantidad de cuartillas que V. me remita.

Tengo grandes deseos de que salga pronto mi libro, pues tengo ya otros dos en preparación; en el que lo tiro todo es en Besos de Oro libro que honraré con la dedicatoria a V. tiene dos partes; una llamada «Bruma» en donde irán las poesías de ensueño y de dolor y de nostalgias; y otra, titulada «Luz» que estará formada por las poesías cerebrales, fábulas mitológicas, etc.; una parte de plata y otra de oro.

También trabajo en El poema de las Canciones, de cuyo libro forman parte «La Canción de la Carne» y la de los «Besos» que van en Ninfeas.

Ya remitiré a V. originales, para que vaya V. conociendo los nuevos libros; brevemente enviaré a V. El jardín de los cipreses y El Palacio negro, poemas de Besos de oro. De hoy en adelante, mis libros no llevarán prólogos; quiero que el de V. en Ninfeas sea solamente mi presentación.

Vuelvo a rogarle que, sin violentarse me haga pronto el atrio, bien en prosa, bien en verso y como V. quiera y crea más conveniente y rápido.

Un abrazo estrechísimo de su apasionado admirador y amigo.

Juan Ramón Jiménez

4c. Cánovas. - 10 Moguer

(Huelva)

José Martí (1853-1895)


Fue un político liberal, pensador, periodista, filósofo y poeta cubano, organizador de la insurrección cubana de 1895 contra el gobierno español. Perteneció al movimiento literario del modernismo.

José Martí pasó su vida luchando por una Cuba independiente y democrática a través de las palabras, pero ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el gobierno español de la Restauración (1872-1898) decidió apoyar la insurrección armada. Un mes después de haber llegado a Cuba para combatir murió en un tiroteo sin importancia.

Su influencia sobre los cubanos es grande. En general es considerado por sus compatriotas como la persona que dio forma de la nacionalidad cubana tal como la conocemos hoy. La buena fama de Martí no sólo se debe a sus ideas sino también a su gran capacidad de trabajo, su sobriedad, su palabra persuasiva, y a que dio su vida por su país (podía haber dirigido la guerra a distancia desde los Estados Unidos sin peligro) sin llegar a verlo nacer (tras la Guerra hispano-norteamericana en 1898).

Entre la producción de literaria de Martí está su libro “Versos sencillos”. Varias de sus estrofas fueron usadas para poner letra a una música creada a principios de los años treinta del siglo XX en Cuba: Guantanamera.

Aquí van varios enlaces a distintas versiones de la canción con letras complementarias:


Celia  Cruz

Pete Seeger
http://www.youtube.com/watch?v=1EJ1kZ0yBzg

75 cubanos repartidos por el mundo cantan Guantanamera
https://www.youtube.com/watch?v=blUSVALW_Z4

Compay Segundo