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jueves, 26 de junio de 2014

Repositorio

SEKUNDA, Nicholas: Macedonian armies after Alexander 323–168 BC, Osprey Publishing, 2012
Ilustrador: DENNIS, Peter

Colección Men-At-Arms 477

Traducción por el profesor Julio Dapena Losada

Los ejércitos macedonios después de Alejandro del 323 al 168 después de Cristo

Los escudos macedonios

En la batalla de Pydna a los falangitas macedonios se los muestra llevando sus sarisai con dos manos. Desde hace mucho tiempo los historiadores modernos han considerado imposible que la sarisa fuese manejada con ambas manos mientras al mismo tiempo se sostenía el escudo, y dicen que habría sido necesario colgar el escudo del cuello mediante una correa. Sin embargo, la arqueología experimental ha demostrado que, con práctica, es del todo posible llevar con eficacia un escudo en conjunción con una sarisa de hasta 5'8 metros de largo. La forma de agarrar este escudo era diferente a la del escudo hoplita. En el año 228,

     Cascos
     Hubo dos cambios fundamentales en el equipo de la infantería que empezaron a aparecer antes de la muerte de Alejandro Magno: la distribución/reparto/suministro de escudos macedonios y cascos de tipo pilos para sustituir a los escudos hoplitas y a los cascos "frigios". Las monedas de bronce "con casco y escudo" acuñadas por Alejandro o por su hijo Alejandro IV muestran un casco pilos en una cara y un escudo macedonio en la otra. Juhel (2009) ha llamado la atención sobre un fragmento anteriormente ignorado de Sexto Julio Africano, que afirma que Alejandro repartió/distribuyó cascos laconios (pilos) a su ejército, aparentemente en la parte final de su reinado. Sin embargo en Macedonia el casco "frigio" siguió siendo usado durante un tiempo como lo demuestran los frescos de la tumba de Agios Athanassios (láminas E2 y E3). En contextos literarios posteriores el casco pilos parece que se llama konos.

     Armaduras
     Los reglamentos militares de Anfípolis amenazan a los soldados rasos de la falange con una multa de dos óbolos por estar sin kothybos (término que no entendemos del todo), grebas o konos; tres óbolos por estar sin sarisa o espada; y una dracma -equivalente a seis óbolos- por estar sin escudo. Las multas para los hegemones (literalmente, "jefes") son el doble para estos artículos, y además dos dracmas por estar sin coraza y una dracma por estar sin media coraza. En la Macedonia helenística el término hegemon había comenzado a aplicarse no sólo a los oficiales, sino a todos los oficiales de la primera fila.